Condicional
Quedan pocas horas para que finalice el año y, como de costumbre, debo hacer un balance. Eso me pone nervioso ya que sé que de tirar línea ahora mismo, tendría números rojos. Cifras rojas y muy feas.
Urgente: necesito algo extremadamente bueno para superar las perdidas y mermas de este año. O, al menos, un montón de cosillas medianamente regulares para terminar con algo de dignidad. O sea, un poquito de dignidad. Pero nada. No pasa nada. O mejor dicho: pasa NADA. No aparecen comodines ni cartas adecuadas para este juego. Sólo acumulo cartas y no me puedo bajar. Estoy preocupado. Balance rojo. Estoy siendo inviable y no logro conseguir la formula para arreglarlo. Y cada vez está más cerca el 31. Y luego el primero.
Entonces, ¿cómo puedo ponerme metas para el 2007 si aun tengo tareas pendientes del 2006? Tareas grandes. El problemas es que, a diferencia del colegio, los años no se pueden repetir. Sólo se acumulan y pasan. Como una mochila que llevas a todas partes. Y no estoy hablando sólo de las experiencias (buenas y malas), sino del tiempo transcurrido que no volverá sino como recuerdos viejos.
El año termina y con eso un poco de mi vida. Este año, como todos los pasados y por pasar, conforman el patrimonio de mi existencia y un año perdido es un lujo que no me puedo dar. Por eso estoy nervioso, porque necesito salvar el año. Y me queda poco tiempo. Y estoy aquí escribiendo mientras podría hacer otra cosa, pero necesito anotar todo esto como un recordatorio de lo que me queda por hacer. Que es mucho. Y poco tiempo. ¿Lo podré hacer? No lo sé, pero lo intentaré. Y recuerden: ayúdenme a pasar el año.
Eso. Opinen.
Urgente: necesito algo extremadamente bueno para superar las perdidas y mermas de este año. O, al menos, un montón de cosillas medianamente regulares para terminar con algo de dignidad. O sea, un poquito de dignidad. Pero nada. No pasa nada. O mejor dicho: pasa NADA. No aparecen comodines ni cartas adecuadas para este juego. Sólo acumulo cartas y no me puedo bajar. Estoy preocupado. Balance rojo. Estoy siendo inviable y no logro conseguir la formula para arreglarlo. Y cada vez está más cerca el 31. Y luego el primero.
Entonces, ¿cómo puedo ponerme metas para el 2007 si aun tengo tareas pendientes del 2006? Tareas grandes. El problemas es que, a diferencia del colegio, los años no se pueden repetir. Sólo se acumulan y pasan. Como una mochila que llevas a todas partes. Y no estoy hablando sólo de las experiencias (buenas y malas), sino del tiempo transcurrido que no volverá sino como recuerdos viejos.
El año termina y con eso un poco de mi vida. Este año, como todos los pasados y por pasar, conforman el patrimonio de mi existencia y un año perdido es un lujo que no me puedo dar. Por eso estoy nervioso, porque necesito salvar el año. Y me queda poco tiempo. Y estoy aquí escribiendo mientras podría hacer otra cosa, pero necesito anotar todo esto como un recordatorio de lo que me queda por hacer. Que es mucho. Y poco tiempo. ¿Lo podré hacer? No lo sé, pero lo intentaré. Y recuerden: ayúdenme a pasar el año.
Eso. Opinen.